Las drogas tienen un efecto funesto en nuestro cuerpo, su efecto es peligroso y muy negativo distorsiona la relación entre dos personas. No ayuda a mejorar la capacidad de seducción ni mucho menos a la relación sexual.
Las drogas alteran el poder de decisión, nos hacen perder el control de uno mismo, aumenta la práctica de las relaciones sexuales sin protección, lo que conlleva un riesgo no sólo de un embarazo no deseado si no también del contagio de enfermedades de transmisión sexual.
Las personas buscan a través de las drogas mayor satisfacción sexual pero este es el error, porque es uno de los grandes enemigos para la relación sexual y el placer.
Las principales drogas que se utilizan para tener sexo son:
Alcohol
Es FALSO eso de que el alcohol es un afrodisiaco, todo lo contrario, al principio puedes tener un subidón aparente, que luego se transforma en dificultad para llegar al orgasmo por parte de la mujer y una disfunción eréctil en el hombre.
En dosis muy bajas puede funcionar como desinhibidor aumentando la autoestima sexual que se tiene de uno mismo, pero esto a la larga también trae problemas como disminución de la testosterona.
Disminuye el impacto emocional y placer entre personas.
También aumenta el riesgo de embarazo no deseado y el contagio de ETS.
Marihuana, hachís
Su consumo habitual puede afectar en la fertilidad, reduciendo los niveles de testosterona y el líquido seminal en el hombre y reduciendo el funcionamiento ovárico en las mujeres. Puede provocar desinterés por el sexo o falta de líbido.
A las mujeres les puede provocar sequedad vaginal lo que hace que el coito sea más doloroso.
Anfetaminas
Es una droga que puede provocar euforia y que la persona se desinhiba, pero en realidad dificulta la excitación en la mujer y la disfunción eréctil en el hombre.
Heroína
La heroína es una de las drogas más peligrosas y disminuye de manera considerable la respuesta sexual en el hombre, porque provoca un retraso en la eyaculación, una inhibición del orgasmo y reduciendo la líbido.
En las mujeres provoca dificultad para llegar al orgasmo, falta de deseo e incluso alteraciones en el ciclo menstrual.
Cocaína
Hay que acabar con el falso mito de que la cocaína funciona como estimulante sexual, ya que puede provocar disfunción eréctil y erecciones dolorosas. Actúa como un analgésico que es muy potente por lo que en realidad produce el efecto contrario en la persona.
Con cualquiera de éstas y otras drogas se corre el riego de contagiarse de una enfermedad de transmisión sexual así como de quedarse embarazada sin haberlo planificado, ya que producen en la persona falta de control, se pierde la noción del cuidado que se debe tener cuando se mantienen relaciones sexuales.