Las Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS) representan un problema de salud pública global, y las mujeres son particularmente vulnerables a sus efectos. Algunas infecciones pueden ser silenciosas, pero sus consecuencias pueden afectar seriamente la salud reproductiva si no se detectan y tratan a tiempo.
ETS más comunes en mujeres
1. Virus del Papiloma Humano (VPH)
Es la ETS más común a nivel mundial. Existen más de 100 tipos, algunos de los cuales están relacionados con el cáncer de cuello uterino. Generalmente no presenta síntomas, pero puede detectarse mediante una prueba de Papanicolaou y una prueba de VPH.
Prevención: uso de preservativo y vacunación contra el VPH.
2. Clamidia
Infección bacteriana frecuente, especialmente en mujeres jóvenes. Muchas veces no presenta síntomas, pero puede causar enfermedad inflamatoria pélvica, infertilidad y embarazo ectópico si no se trata.
Síntomas: flujo vaginal anormal, ardor al orinar, dolor abdominal o durante las relaciones sexuales.
Prevención: uso de condón y pruebas regulares si hay actividad sexual.
3. Gonorrea
Otra infección bacteriana que afecta el cuello uterino, la uretra y, si no se trata, puede extenderse al útero y las trompas.
Síntomas: flujo amarillento, dolor pélvico, sangrado entre periodos, aunque también puede ser asintomática.
Prevención: preservativo y chequeos frecuentes.
4. Herpes genital
Causado por el virus del herpes simple (VHS), se transmite por contacto piel con piel durante relaciones sexuales. No tiene cura, pero se puede controlar.
Síntomas: llagas o ampollas dolorosas en la zona genital, fiebre, dolor al orinar.
Prevención: evitar contacto sexual durante brotes, uso de preservativo.
5. Sífilis
Puede pasar desapercibida por años, pero si no se trata puede dañar órganos vitales. En mujeres embarazadas, puede transmitirse al bebé.
Síntomas: úlceras genitales indoloras, erupciones, fiebre, fatiga.
Prevención: exámenes médicos periódicos y prácticas sexuales seguras.
6. Tricomoniasis
Infección causada por un parásito que puede producir flujo vaginal con mal olor, picazón o ardor. Es fácilmente tratable con medicamentos.
Síntomas: flujo verdoso o amarillento, picor vaginal, dolor al orinar.
Las ETS pueden afectar gravemente la salud de las mujeres, especialmente si no se detectan a tiempo. La mejor manera de prevenirlas es mediante el uso de protección durante las relaciones sexuales, la realización de chequeos regulares y el acceso a educación sexual adecuada. Si tienes dudas o síntomas, consulta a tu ginecóloga/o. Cuidar tu salud sexual es parte esencial de tu bienestar integral.