Sí se pueden emplear, pero siempre tiene que ser el ginecólogo quien valore tu historia médica, ya que no todas las mujeres pueden usar anticonceptivos que contienen estrógenos como pueden ser las mujeres que tienen colesterol elevado, hipertensión, obesidad, ser fumadora, tener diabetes, cáncer de mama, enfermedades hepática grave, etc.
Muchas mujeres no quieren seguir tomando la píldora porque piensan que aumenta el riesgo de cáncer, pues las pastillas anticonceptivas reducen la incidencia del cáncer de ovario y de endometrio. Tienen beneficios a largo plazo, como que favorecen la densidad ósea y reducen los síntomas de la regla. También reducen la incidencia de quistes y fibromas en las mamas.
Las píldoras anticonceptivas hormonales combinadas tienen una dosis de estrógeno ajustada y baja. Otras pastillas con algo más de dosis de estrógeno pueden controlar mejor el ciclo y prevenir mejor la pérdida de densidad ósea.
Depende porque el mejor método anticonceptivo es el que se adapta a cada mujer.
Hay mujeres que no quieren hormonas y por eso se emplea el DIU de cobre.
El DIU hormonal es empleado por mujeres que ya han tenido hijos y buscan un anticonceptivo cómodo. Además, tiene la ventaja porque disminuye la menstruación o la hace desaparecer.
No, porque pueden pasar a leche materna y disminuir su producción. A partir de las seis semanas postparto, si estás con lactancia, se puede empezar a tomar anticonceptivos con gestágenos, uso del DIU de cobre u hormonal, o poner el Implante subdérmico.